Laura de la Fuente/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Decidiste tener un perro por primera vez, llegas a casa con tu nuevo amigo en brazos, y antes de ponerlo en el suelo, vienen a tu mente todos los programas de televisión que has visto sobre canes, las recomendaciones de tus papás, de los amigos, te acuerdas que tú mismo has aconsejado cientos de cosas que viste alguna vez o escuchaste de algún lado. 

Lo primero que salta a tu mente es entrenarlo para que haga sus necesidades fuera de casa –básico-. Entras en pánico y te preguntas si tomaste la mejor decisión. ¡Tranquilízate!, pues tomaste la mejor decisión. Estás a punto de iniciar una gran aventura, en donde conocerás el significado del amor incondicional, y dentro de poco, podrás observar cómo para esos grandes ojos que hoy te miran con curiosidad, serás lo mejor que le ha pasado en la vida.

Aquí van unos consejos del equipo de Mi Mascota Preferida, si es tu primera vez: baja a tu cachorro en la entrada de tu casa; con palmaditas o un chasquido de tu boca, invítalo a que te siga adentro. Déjalo olfatear. Nuestro etólogo, Jorge Pozas, recuerda que los cachorros nacen ciegos y es por medio de su nariz por donde conocen el mundo. El olfato es su primer instinto de supervivencia.

Cuidados

Acompáñalo mientras recorre olfateando por todos lados. Procura no levantarlo en brazos, no hagas ruidos que lo asusten, esta primera vez en casa deberá ser tranquila y amable, de lo contrario, puede sufrir algún desorden psicológico difícilmente reversible. Cuando ya esté tranquilo y comience a  juguetear lo podrás tocar, pero sin levantarlo del suelo, solo acarícialo.  

Cuando pase la emoción y tu cachorro se sienta tranquilo, se echará a dormir. Invítalo a seguirte con empujoncitos muy suaves hasta su cama, ponlo en ella, siéntate junto a él y acarícialo, lentamente, hasta que se quede dormido. Te recomendamos poner en su cama una prenda impregnada del olor de su mamá.

Respuestas

Al despertar de su siesta, tu cachorro querrá orinar, así que tienes escasos minutos para llevarlo a la zona que hayas designado para que sea su baño; permanece allí hasta que orine, y cuando termine, acarícialo. Es importante que en esta primera vez no limpies donde orinó. Deja que se impregne el olor en el piso para que la próxima ocasión que lo lleves reconozca su olor.

La constancia te llevará al éxito con la ubicación del lugar en donde designes para que haga sus necesidades. Recuerda que el área de alimentación, así como su zona de dormir,  deberán estar alejadas de la zona del baño. Lo que hagas con tu cachorro en esos siete primeros meses será la base que hará de él un gran amigo o el peor de los tiranos caninos. Seguro tendrás muchas más dudas, así que escríbenos en nuestra página de Facebook/MMPreferidaTv. Trataremos de dar respuesta a todas tus inquietudes. Hasta la próxima.