La gula bestial del delegado de la SCT

Los delegados del Centro SCT ya conocen muy bien el caminito: favorecer a placer a sus compadres y demás cómplices con la asignación amañada de obras...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Los delegados del Centro SCT ya conocen muy bien el caminito: favorecer a placer a sus compadres y demás cómplices con la asignación amañada de obras, convirtiendo esa posición en una fiel escenografía de la cueva de Alí Babá y los 40 ladrones. Me cuentan que el actual delegado en Quintana Roo, Francisco Elizondo Garrido, se entiende muy bien con los constructores que se mochan con el diezmo muy generoso. Hablamos de un selecto grupo de consentidos que roen en las sombras más pestilentes.

Un constructor chetumaleño fuera de la jugada me reveló que el 80 por ciento de las asignaciones de obra son otorgadas a empresarios del Distrito Federal y otros confines, dejando morir de inanición a íntegros empresarios de la capital del Estado, contra los lineamientos marcados por el presidente Enrique Peña Nieto, quien debe ignorar las perversas maniobras de este junior que fue diputado plurinominal del Verde Ecologista por Veracruz.

Imperdonable este tipo de maniobras porque el sector privado de Chetumal necesita con urgencia el flujo de asignaciones de obras, y éstas en cambio son repartidas por el señor delegado a su círculo selecto.

Este junior con suerte tan sólo se limita a recoger el dinero con carretillas, descuidando por completo una encomienda tan vital. Lo suyo es el contubernio y el bisne, siguiendo los sabios consejos de su líder inmoral, el Senador del PVEM por Quintana Roo, Jorge Emilio  González Martínez, el “Niño Verde”.

Y por un imperdonable acto de negligencia, Elizondo Garrido es responsable moral de la muerte de un empleado que cayó en el cumplimiento del deber el pasado miércoles, cuando su camioneta fue interceptada en el tramo cercano a la desviación con la vía corta a Mérida.

Filiberto Caamal May fue baleado y perdió la vida, al ser atacado desde un vehículo en movimiento. Los agresores se apoderaron de 650 mil pesos, dejando herido al acompañante Artemio Poot Vázquez.

Los empleados del Centro SCT cumplían en el desamparo la orden de trasladar cerca de 850 mil pesos para el pago de trabajadores en diversas zonas del sur, beneficiados con el programa de Empleo Temporal.

Diputados que no dan golpe  

Algo muy curioso sucede en el Congreso local, donde con un simple recorrido por su portal de Internet es notorio un enorme desequilibrio entre los diputados, ya que cinco de ellos concentran el 80 por ciento de las iniciativas presentadas y aprobadas, mientras los 20 restantes por lo visto solo han servido de comparsa.

Es inaceptable el bajo nivel de productividad de nuestros representantes populares, ya que si como en cualquier otro trabajo se les pagara por lo que hacen en realidad, varios de ellos no hubieran recibido ni siquiera una propina.

Y es que hay varios diputados que aparecen con cero iniciativas presentadas en el año y medio que llevan en el cargo, entre los que destacan varios vivales que llegaron al Congreso no por los votos ciudadanos, sino por la vía plurinominal.

El club del cero está integrado por Hernán Villatoro Barrios (PT), Fernando Roldán Carrillo (MC), Pablo Lemmen Meyer (PVEM), Jorge Aguilar Osorio (PRD), Trinidad García Argüelles (PAN), y los priistas Martín de la Cruz Gómez, Jesús Pool Moo, y el líder de la bancada Tricolor, Pedro Flota Alcocer.

Por supuesto que para disimular su apatía legislativa todos estos diputados aparecen como adherentes en la iniciativa de colocar letras doradas en el recinto para celebrar el centenario del Ejército Mexicano, y algunos también respaldaron la polémica iniciativa de Ordenamiento Cívico, pero ambas fueron iniciativas colectivas que no reflejan el trabajo individual.

Y mientras ocho diputados se han dedicado a vegetar por completo, cinco –todos ellos priistas– acaparan el grueso de las iniciativas presentadas en el pleno.

Encabeza la lista el líder del Congreso, José Luis “Chanito” Toledo, que sin contar la intrascendente iniciativa de las letras doradas presentó 17 iniciativas que ya han sido aprobadas, según información del sitio web del Congreso.

Le siguen la diputada cancunense Berenice Polanco Córdova, con ocho iniciativas presentadas al pleno; Arlet Mólgora Glover, con seis, así como Susana Hurtado Vallejo y Juan Carrillo Soberanis, con cinco cada uno.

Los restantes 12 diputados han presentado entre una y dos iniciativas.

Pero además de la patente improductividad de gran parte de los legisladores, hay otro problema aún mayor, y es que casi todas las leyes emanadas del Congreso local son de simple oropel, se escuchan muy bonitas, pero no son aplicables en la realidad.

Muchas de las leyes en nuestro marco jurídico son letra muerta porque aunque están inscritas en nuestra Constitución local, no existen las condiciones socioeconómicas para llevarlas a la realidad.

En esa categoría entraría por ejemplo, las iniciativas que promueven en la actualidad los diputados José Luis Toledo (Ley de Tu Primer Negocio), Juan Carrillo Soberanis (Ley del Primer Empleo) y Arlet Mólgora Glover (Ley de Lactancia Materna).

No es que estas iniciativas sean malas, pero el hecho es que son un compendio de buenas intenciones poco realistas que difícilmente serán aplicables en el mundo real, al menos en el mediano plazo.

Otro factor que contribuye al fracaso de las leyes locales es que se publicitan solo con fines políticos, para fortalecer la imagen de ciertos diputados, pero una vez aprobadas quedan en el olvido. 

Eso sí, mantener a esta inoperante Legislatura nos costó tan sólo en el presente año unos 447 millones 782 mil 260 pesos, lo que representa que cada iniciativa de ley presentada en 2014 nos costó en promedio unos 10 millones de pesos. 

Alistan Festival de Cultura del Caribe

Esta semana se dio a conocer el programa del Festival de Cultura del Caribe 2014, evento icónico de nuestro Estado que fue rescatado por el gobernador Roberto Borge.

El Festival de Cultura del Caribe (Fecuca) nació durante el sexenio del gobernador Miguel Borge Martín, y tenía como objetivo la integración de Quintana Roo con la cultura caribeña, siendo un anfitrión de lujo permanente.

Por más de una década el Fecuca fue un crisol cultural donde los países de la cuenca caribeña mostraban lo mejor de sus artes, convirtiéndose en un evento icónico de nuestro Estado.

Sin embargo, en 2001 dejó de realizarse y el Fecuca quedó en el terreno de las anécdotas, hasta que el año pasado el gobernador Robert Borge decidió revivir el proyecto y realizar una edición que resultó bastante exitosa.

Para este 2014 se pretende superar el impacto cultural del festival anterior, con actividades más cercanas al ciudadano común, pero también se trató de optimizar los costos y reducir el gasto.

Al mando del Fecuca estará la subsecretaria de Cultura Lilián Villanueva Chan, quien tendrá una verdadera prueba de fuego en esta ocasión, porque el año anterior se quedó bastante corta y el gobernador tuvo que intervenir, enviado refuerzos que pudieran sacar el trabajo.

Con la experiencia del año anterior, se espera que Lilián Villanueva haya aprendido la lección y pueda desquitar el sueldo en el único evento cultural de gran envergadura que se realiza en el territorio estatal.

El programa ya está publicado en la página oficial del Festival, con una cartelera que incluye representaciones de 13 países, además de la presentación de artistas de talla internacional como Willie Colón y Chichi Peralta, quienes se presentarán en esta capital.

Ajustón de cinturón en el Ayuntamiento capitalino

El pasado miércoles el Cabildo capitalino aprobó la ley de Egresos para el municipio de Othón P. Blanco para el 2015, donde se observa una notable reducción en el gasto destinado a los rubros de servicios personales y servicios generales.

Y es que con las finanzas comprometidas, el alcalde Eduardo Espinosa Abuxapqui se vio obligado a reducir drásticamente los egresos, aunque no se sabe cómo esto afectará al personal del municipio y a los servicios públicos.

Por ejemplo, en el rubro de Servicios Personales –donde se incluyen salarios y compensaciones de los trabajadores municipales– el año pasado se destinaron 313 millones 369 mil pesos, pero para 2015 realizaron un ajuste a la baja de 298 millones 875 mil, lo que significa una diferencia de 14 millones 494 mil pesos. 

Lo mismo ocurre en Servicios Generales donde la reducción del gasto fue aún más drástica, al pasar de 145 millones 631 mil pesos en 2014, a unos 128 millones para el 2015, lo que representa unos 17 millones de pesos menos.

A decir del alcalde, estos ajustes no perjudicarán ni a los empleados municipales ni a los servicios públicos, sino que forman parte de un plan de austeridad para lograr este ahorro. Incluso se destinó dentro del presupuesto de egresos poco más de 100 millones de pesos para obra pública.

En total, el estimado de ingresos y gasto se colocó en 667 millones 889 mil 949 pesos para el próximo ejercicio, lo que a decir de algunos regidores es una cifra conservadora, ya que contempla desde ahora una posible reducción de las participaciones federales en caso de que haya una disminución de los precios del petróleo.

Dadas las circunstancias, Espinosa Abuxapqui tendrá que sacar sus dotes de malabarista para mantener a flote el municipio. 

Lo más leído

skeleton





skeleton