Aguas con el INE
Los comentaristas tendremos que guardar nuestras baterías en tanto conocemos los alcances y tamaños de la nueva ley electoral.
Viene una ley electoral y desconocemos los ciudadanos el contenido de la misma y su aplicación. Desconocemos también si hay alguna jurisprudencia y los criterios de sustento y apreciación; no existe ninguna base, ni elementos de defensa, ya que todo en el INE es nuevo.
Me temo que los comentaristas que estamos acostumbrados a llamar al pan pan y al vino vino tendremos que guardar nuestras baterías en tanto conocemos los alcances y tamaños de la nueva ley. Para no “ganarnos una multa” nosotros o el medio en el que trabajamos.
No creo sinceramente que tengamos la necesidad de andar con amparos y protegiéndonos de cuanto ataque o agresión salga del INE.
No creo que se tenga pensado aplicar la ley del garrote o del silencio; sin embargo, veamos dos casos recientes que fueron tocados de manera distinta, pero con resultados similares.
En la dirección de noticias de Milenio Diario, el titular era Ciro Gómez Leyva que a muchos no les caerá bien, pero como periodista lo he considerado duro y crítico. En muchas ocasiones criticó abiertamente al presidente Peña y el resultado fue que tuvo que dejar su noticiero de la tarde y la dirección de noticias, y pasó a ocupar otro espacio siempre en Milenio con menos responsabilidades.
Otro caso reciente también es el de Pedro Ferriz, que por ser crítico del presidente Peña primero fue removido de la TV, después de las columnas del Excélsior y finalmente de su programa de Radio de 7 a 11 de la mañana; sus jefes habrín recibido “peticiones” y tuvieron que cumplir con el encargo.
No sé de ninguno más hasta este momento, sin embargo conociendo el actuar de algunos medios no sé cuántos se encuentren ya en la calle o a punto de irse.
En el caso personal, estoy vetado en algunas estaciones de radio y no me dan tiempos de ninguna especie, pero lo mío tiene dos años apenas, no se lo puedo achacar al presidente Peña. Por cierto casi nunca lo menciono, no por miedo, sino porque no requiero de su nombre para informar.
Entonces con lo anterior sí temo presiones, sí temo exigencias como derechos de réplica con el mismo tiempo e intención, con partidos no representativos y los verdaderos. Exigencias de respaldos en CD, reportes escritos y transcripciones inútiles, monitoreo de estaciones y medios de comunicación. Mucha parafernalia y poca acción.
Esto me recuerda un viejo refrán: Perro que ladra no muerde, pero el que no, aguas, te despedaza.