Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Lo detuvieron en Maya Balam, lo metieron a la cárcel, salió, y desde entonces desconocían su paradero. No obstante, autoridades policíacas indicaron que está en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal, por robo. J.F.G., de 23 años de edad, habitante de Maya Balam, está en la penitenciaría desde el pasado jueves, al cumplimentarse una orden de aprehensión en su contra por robo. Su familia dice desconocer su paradero, pues le perdieron la pista desde el pasado lunes, cuando salió de la cárcel municipal de Bacalar. Antes, estuvo a punto de ser linchado en su comunidad, ya que forma parte de un grupo de jóvenes que mantienen el desorden en esa población.

El pasado domingo, el mencionado sujeto estuvo involucrado en una gresca con un grupo de jóvenes de la comunidad de Maya Balam y sacó la peor parte, pues además de los golpes recibidos, se lo llevó la patrulla de la Policía Municipal Preventiva de Bacalar a solicitud de los mismos habitantes, pues lo señalaron como uno de los orquestadores de constantes riñas en la comunidad, principalmente los fines de semana, que es cuando aparecen las bebidas alcohólicas entre sus habitantes.

Atienden solicitudes

Situaciones de este tipo mantienen en tensión permanente a los moradores, cuyas autoridades se reunieron por separado con el director de la Policía Municipal de Bacalar, Issa Melitón Ortiz Moguel, y el encargado del despacho de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, Juan Manuel Mercader Rodríguez, para solicitarles la reinstalación de la partida policíaca que retiraron hace un mes.

En respuesta, se destinó una patrulla de la corporación municipal para vigilar esa población y otras circunvecinas, como Kuchumatán, Miguel Hidalgo, y Caanlumil.

Lo detienen por robo

En tanto, al cumplirse las 36 horas de arresto a J.F.G. por faltas administrativas, fue puesto en libertad. Sin embargo, al acudir sus familiares a pagar la multa correspondiente el lunes, ya no pudieron encontrarlo y afirman que desconocen su paradero.

Apenas este viernes, su abogado se reunió con el titular de la Policía Municipal para conocer su paradero, pero le informaron que fue puesto en libertad al cumplir su arresto. Su padre, Domingo Francisco Gaspar, ha acudido a hospitales y con algunos conocidos para saber su paradero, pero no lo han visto desde entonces.

No obstante, a través de fuentes al interior de la Procuraduría de Justicia del Estado se pudo saber que fue aprehendido el pasado miércoles 16 de los corrientes por el delito de robo calificado por orden del Juzgado Segundo y se encuentra recluido en el Centro de Readaptación Social de Chetumal.